Combinar tener un stand en una feria del libro con nuestras labores editoriales regulares es una pesadilla hecha realidad. Siempre puedes optar por asistir solo en calidad de compra-venta de derechos, pero las ventas directas que se obtienen de este tipo de eventos no deberían ser obviadas. Si quiere obtener estos beneficios, pero poder ir a la feria a lo que va un editor, ¿por qué no nos lo dejas a nosotros? Contamos con más de ocho años haciendo este trabajo en la FIL de Guadalajara, la FILIJ, la Feria del Libro de Zócalo, Minería… y tantas otras.